Tener diabetes gestacional en tiempos de coronavirus en Madrid

VickyBol
4 min readNov 8, 2020
Alimentos recomendados para la diabetes gestacional según Comadrona en la ola.

La diabetes gestacional es un tipo de diabetes que aparece durante el embarazo, afecta a una de cada siete mujeres en el mundo y a nueve de cada 100 en España. Es decir, es algo común y no es extraordinario.

Escribo este post porque soy una de esas nueve de cada 100 y he tardado demasiado tiempo, para mi gusto, en encontrar el buen camino para controlarla, y aún estoy en ello. Cada mujer y cada embarazo es un mundo, pero plasmo brevemente mi experiencia por si hay más mujeres perdidas que no tienen ganas de perder su precioso tiempo ni de estresarse.

A priori, una aclaración sobre el titular. Creo que es importante destacar “en tiempos de coronavirus en Madrid” porque es un hecho que la pandemia dilata el tiempo para recibir las citas o contactar con el médico de cabecera o la matrona una vez te sale alterado el test O’Sullivan o la prueba de la curva larga.

Aparte, Madrid, una ciudad con 3,3 millones de personas hace que todo esté saturado y dependa mucho de qué centro de salud u hospital te toque para abordar en más o menos tiempo tus temas de salud. Antes de seguir, tal vez te interese leer estos enlaces del Clínic de Barcelona, el Hospital de La Paz o el CDC de EE. UU. para saber más sobre la diabetes gestacional.

Tras la curva larga, insiste en pedir cita

Hacerse las pruebas de laboratorio en la sanidad madrileña es fácil: pides hora para hacerte la prueba de curva larga, la haces, pero ¿qué pasa después? Te cuelgan los resultados en el portal del paciente, es posible que veas que están mal y no tengas aún cita con el endocrino, un paso necesario para interpretar los datos y continuar el proceso de tratar la diabetes.

En mi caso, la cita no aparecía, así que contacté con mi médica de cabecera (una semana para recibir la llamada), que me dio cita con enfermería para que me dieran el glucómetro. La cita de endocrinología por fin apareció sola, para un mes y pico después. Paralelamente, escribí a la matrona, que me instó a esperar al endocrino y me envió provisionalmente una dieta estándar (descubrí más tarde que era una dieta para una embarazada sin diabetes).

Esta dieta, aunque no era correcta, ayuda a saber que hay que moderar las cantidades de comida y gestionar un poco mejor la alimentación, pero no queda otra que esperar a que te reciba el endocrino.

La visita al endocrino: pídele el contacto

El especialista (según quién te toque, como todo) tampoco es la panacea: tras preguntarte tus datos de peso, estatura, etc., te indica que te tienes que medir la glucosa antes de comer y una hora después, controlar la dieta y hacer bastante ejercicio. En tres semanas te revisa los resultados de las glucemias para ver cómo proceder en función de lo que te dé.

Aproveché esa consulta para comentar mis impresiones de la dieta de la matrona que estaba haciendo. Le dije a la endocrino que pasaba hambre en ciertos intervalos de horas, pero no se mojó, me comentó que su enfermera me daría acto seguido unas indicaciones (nota importante: antes de que te despache pídele al el mail porque es muy probable que te surjan dudas).

Respecto a lo de que pasaba hambre, la enfermera no dijo ni una palabra, solo que siguiera las sugerencias de una nueva dieta que me dio en papel (son las mismas para todo el mundo) y que comiera muy poco pan. Esas recomendaciones son muy parecidas a estas que tiene colgadas el Servicio Madrileño de Salud, que animan a consumir pan, galletas maría (pero si tienen azúcar!!!!), cualquier tipo de verdura (cuando no todas son aconsejables) y varias frutas de cualquier tipo al día 🤦🏻‍♀️

Realmente, hasta que no empiezas a seguir estrictamente esa dieta y a medirte la glucosa seis veces al día, no sabes si te va bien o no. Spoiler: me ha ido mal.

Ante niveles inestables de glucosa existen soluciones

Tras semana y media de sacrificio, pasando hambre a ciertas horas y haciendo mucho más ejercicio del habitual para que las glucemias no fueran tan altas, di con este post de Comadrona en la ola, “Manejo actualizado de la Diabetes Gestacional”.

Me ayudó a comprobar que es muy común recibir dietas que no te convienen, y explica cómo pueden actuar ciertos alimentos en tu cuerpo. Gracias al post fui haciendo pruebas con ciertos platos y viendo los niveles de azúcar con el glucómetro. He descubierto que, en mi caso, el pan, los cereales, la pasta (aunque sean integrales) o la fruta, son el mal.

Comadrona en la ola también aconseja que consultes con un nutricionista actualizado. Obviamente, no todo el mundo puede acudir a uno, cuesta dinero y para eso nos hacen un seguimiento en la sanidad pública. Creo que por eso es importante tener el contacto del endocrino, para insistir en que algo no funciona y que por favor te dediquen 10 minutos de su tiempo para encontrar el camino correcto.

Yo cometí el error de no pedir el mail y he optado por un nutricionista online (quiero rapidez), porque ver niveles altos o bajos me preocupa y me estresa no saber qué estoy haciendo mal y cómo puedo solucionarlo.

Aún es pronto para ver resultados, pero en el rato que me dedicó, el nutricionista me escuchó (clave, no me pasó en la endocrino, enfermera o matrona), le comenté mis impresiones de las pruebas que había hecho, datos como peso, estatura, etc. y mis hábitos y me ha diseñado una dieta personalizada sin pan, muy poca fruta, nada de pasta… Por ahora es fantástica, así que actualizaré una vez esté segura 100% de que funciona.

--

--